Larry Fink, fundador, presidente y consejero delegado de BlackRock, la mayor gestora de fondos y fiduciarios del mundo, centra su carta anual a los CEO de las entidades clientes en los riesgos asociados al cambio climático y en la transparencia con los inversores.
¿Serán capaces las ciudades de financiar las necesidades de infraestructura a medida que el riesgo climático redefine el mercado de Estados Unidos los bonos municipales?
¿Qué pasará con las hipotecas a 30 años si los acreedores no pueden estimar el impacto del riesgo climático para un horizonte tan extenso o si no hay un mercado viable para seguros sobre inundaciones o incendios en áreas afectadas?
¿Qué pasa con la inflación y, a su vez, con las tasas de interés si el valor de los alimentos aumenta a causa de sequías o inundaciones?
Estas son algunas de las preguntas que con una mayor frecuencia se harán los inversiones a la hora de tomar decisiones según Fink. El fundador de BlackRock insiste durante su carta anual que el cambio climático se ha convertido en un factor decisivo en las proyecciones a largo plazo de las compañías. Y, por ende, de los inversores a la hora de reevaluar los supuestos básicos sobre las finanzas actuales. Además, Fink recuerda que algunas investigaciones ya “están profundizando nuestra comprensión respecto a cómo el riesgo climático impactará tanto en nuestro mundo físico como en el sistema global de crecimiento económico”.
La carta anual de Larry Fink se ha convertido en todo un referente en el ámbito de la sostenibilidad. Desde hace años, Fink promueve la importancia de abordar los asuntos ESG (ambientales sociales y de gobernanza), y en concreto aspectos como el propósito empresarial o el cambio climático como puntos críticos para la generación de valor a largo plazo.
A pesar de haber sido un año complejo para las finanzas sostenibles en EEUU, donde las fuerzas republicanas rechazan la consideración de aspectos ESG en las decisiones de inversión, así como la descarbonización de las carteras, BlackRock mantiene vigente su mensaje, recalcando que el cambio climático y la transición energética son riesgos a largo plazo, cruciales a tomar en cuenta para invertir. Y no sólo los riesgos, también las oportunidades.
El CEO de BlackRock considera que la inversión sostenible es la base más sólida para los portafolios de sus clientes de BlackRock cara al futuro, ya que situar la sostenibilidad en el centro del foco de la inversión, se convertirá en pieza esencial de la construcción de cartera y la gestión de riesgo a medio y largo plazo.
En definitiva, Larry Fink sostiene durante todo su discurso en desinvertir en carteras de alto riesgo relativo a la sostenibilidad, fomentar el lanzamiento de nuevos productos de inversión que se descentren de los combustibles fósiles y fortalecer el compromiso con la sostenibilidad, siempre desde la transparencia.
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Fuente: Global Factor
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