La fuente fotovoltaica está a punto de convertirse en el segundo mayor generador de energía de Brasil, por detrás de la energía hidroeléctrica.
En septiembre, Brasil superó una nueva marca histórica de 20 gigavatios (GW) de potencia solar instalada. Sumando las plantas de gran escala y los sistemas de generación eléctrica en techos, fachadas y pequeños terrenos, el número equivale al 9,6 % del mix eléctrico del país. Actualmente hay aproximadamente 1,2 millones de sistemas solares residenciales instalados.
Ese tipo de energía está en auge. De enero a principios de octubre de este año, la energía solar creció un 44,4 %, al pasar de 13,8 GW a 20 GW.
Solo en los últimos 120 días, la tasa de crecimiento ha sido de prácticamente un GW por mes, lo que coloca a la fuente en la tercera posición de la matriz eléctrica brasileña (junio: 15,8 GW, julio: 16,4 GW, agosto: 17,5 GW, septiembre: 18,6 GW, octubre: 20 GW).
Grandes inversiones
Asimismo, la fuente de energía solar supuso cerca de R$ 103.000 millones de reales brasileños (casi 20.500 millones de euros) en nuevas inversiones a Brasil, más de 27.200 millones de reales de ingresos en las arcas públicas y generó más de 600.000 empleos desde 2012. Con ello, también evitó la emisión de 28,4 millones de toneladas de CO2 en la generación de electricidad.
También, en el segmento de generación de energía propia, existen prácticamente 13,5 GW de potencia solar instalada. Eso equivale a aproximadamente 73.900 millones de reales (14.656 millones de euros) en inversiones y 405.000 empleos acumulados desde 2012, repartidos en las cinco regiones de Brasil. Actualmente, la tecnología solar se utiliza en el 99,9 % de todas las conexiones de autogeneración del país, liderando el segmento.
Fuente: El periódico de la energía