Para enfrentar los efectos del cambio climático y siguiendo los compromisos adquiridos en la reciente Conferencia de las Partes (COP27), el Ministerio de Ambiente de Ecuador lidera la elaboración del Plan Nacional de Adaptación al cambio climático (PNA). Este tipo de plan busca encontrar soluciones resilientes para afrontar eventos extremos, daños y pérdidas, según ha explicado el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
“Hay mucho trabajo por hacer, estamos empezando con paso firme, recientemente en la COP 27 se ha logrado que se incluya el tema de pérdidas y daños”, ha señalado la Cartera de Estado con referencia a la elaboración del PNA.
Según indicó la Organización de Naciones Unidas (ONU), la COP27, que concluyó el pasado noviembre, se basó en los resultados de la COP26 “para adoptar medidas en ciertas cuestiones esenciales para hacer frente a la emergencia climática, que incluyen desde la reducción urgente de las emisiones de gases de efecto invernadero, el fortalecimiento de la resiliencia y la adaptación a las consecuencias inevitables del cambio climático, hasta el cumplimiento de los compromisos de financiación de la acción climática en los países en vías de desarrollo”.
En su declaración al concluir la COP27, el Secretario General, Antonio Guterres, señaló que “el caos climático es una crisis de proporciones bíblicas” y pidió que “las voces de quienes están en la primera línea de la crisis climática deben ser escuchadas”.
Además, Guterres señaló que se debe crear una hoja de ruta creíble para duplicar la financiación de la adaptación: “Cambiar los modelos de negocios de los bancos multilaterales de desarrollo y las instituciones financieras internacionales. Deben aceptar más riesgos y aprovechar sistemáticamente la financiación privada para los países en desarrollo a costos razonables”.
La Organización de las Naciones Unidas ya ha advertido sobre los efectos del cambio climático en el mundo. Un informe de la ONU indicó que el cambio climático “es generalizado, rápido y se está intensificando”. Además, el organismo internacional señala que muchos de los cambios observados en el clima “no tienen precedentes en miles, sino en cientos de miles de años, y algunos de los cambios que ya se están produciendo, como el aumento continuo del nivel del mar, no se podrán revertir hasta dentro de varios siglos o milenios”.
En Ecuador, según la cartera medioambiental, las inundaciones, cada vez más frecuentes e intensas, son uno de los efectos del cambio climático en el país.
En agosto de 2021, se publicó una alerta acerca de las consecuencias del calentamiento global y la subida del nivel del mar. Los resultados mostraron que ciertas localidades del Golfo de Guayaquil y de las costas de la provincia de El Oro, Manabí y Esmeraldas están catalogadas bajo riesgo puesto que las inundaciones podrían causar la desaparición parcial o total de esas zonas.
Asimismo, en septiembre del año anterior, un estudio científico advirtió sobre los efectos adversos que podrían provocar los cambios en las corrientes marinas de El Niño y La Niña sobre las especies marinas y terrestres de las islas Galápagos, uno de los santuarios naturales más importantes del mundo. El estudio señaló que el cambio climático disminuirá la productividad primaria de los ecosistemas marinos, reducirá la disponibilidad de alimentos en los ecosistemas terrestres, y favorecerá a las especies invasoras de rápida adaptación.
El PNA que impulsa el Ministerio del Ambiente contendrá estrategias de desarrollo que involucrará a seis líneas de trabajo: el patrimonio hídrico, el patrimonio natural, la salud y vigilancia, los asentamientos humanos, la agricultura y el rendimiento de los cultivos, y los sectores estratégicos.
Estas áreas incluirán los análisis sobre la oferta de agua en el país, la propagación de vectores como el mosquito, estrategias de medición de riesgos de inundaciones y deslizamientos, entre otros.
Fuente: Infobae