El Consejo de la Unión Europea (UE), en el que están representados los Gobiernos de los Veintisiete, ha acordado este lunes su posición sobre nuevas normas para agilizar los permisos del despliegue de energías renovables.

En concreto, el Consejo ha llegado a un acuerdo (orientación general) sobre modificaciones específicas de la Directiva sobre energías renovables propuestas en el marco del plan REPowerEU, que ahora deberá abordar con el Parlamento Europeo.

Zonas de acceso

El Consejo aboga por que los Estados miembros diseñen “zonas de acceso” específicas para las energías renovables con procesos de concesión de permisos abreviados y simplificados en zonas con menores riesgos medioambientales, ha indicado la institución en un comunicado, al término de una reunión de ministros comunitarios de Energía.

El Consejo ha confirmado el objetivo de que en 2030 la cuota de energía procedente de fuentes renovables en el consumo final bruto de la Unión ascienda al menos al 40 %.

La propuesta de la Comisión en REPowerEU consistía en aumentar el objetivo hasta, al menos, el 45 % en 2030, mientras que el actual de la directiva sobre energías renovables de 2018 es del 32,5 % para 2030.

Nuevo mapa

Por lo que respecta a las zonas prioritarias, el Consejo defiende que los Estados miembros tracen -en un plazo de 18 meses tras la entrada en vigor de esta directiva- un mapa de las áreas necesarias para las contribuciones nacionales hacia el objetivo de energía renovable de 2030.

Adoptarán uno o varios planes para designar las “zonas de uso prioritario de las energías renovables” en un plazo de 30 meses desde que entre en vigor la directiva.

En sus planes de designación de zonas idóneas para las energías renovables, los Estados miembros también deberán adoptar medidas de mitigación que contrarresten las posibles consecuencias ambientales adversas de las actividades de desarrollo de los proyectos ubicados en cada zona idónea.

Evaluación ambiental para las zonas

El conjunto de los planes se sometería entonces a una evaluación simplificada de impacto ambiental, en lugar de realizar una evaluación para cada proyecto, como suele ser el caso.

El Consejo ha acordado asimismo un plazo más breve, de 6 meses, para las zonas ya designadas como aptas para un despliegue acelerado de renovables, si entre otras cosas no se encuentran en zonas de la red Natura 2000 y han sido objeto de una evaluación ambiental.

Los Estados miembros podrán excluir las instalaciones de combustión de biomasa y las centrales hidroeléctricas de la designación de zonas aptas para las renovables, debido a sus particularidades.

Para las zonas de acceso a las energías renovables, el Consejo ha decidido que los procesos de concesión de permisos no duren más de un año para los proyectos de energías renovables, y dos años para los que se sitúen en alta mar.

Para los equipos solares, el proceso de concesión de permisos no podrá superar los tres meses.

Novedades para almacenamiento

Se ha ajustado el contenido del texto del Reglamento de emergencia de permitting, que es de aplicación temporal y limitada, introduciendo elementos de aceleración para redes y almacenamiento energético, pero con dos características fundamentales:

  • Estas disposiciones serán de aplicación totalmente voluntaria por parte de los Estados Miembros (solo en caso de que así lo decidan).
  • Además, solo se aplicarán en caso de que los Estados Miembros hayan definido zonas prioritarias para renovables o redes.

Fuente: El periódico de la energía