Con la COP27 a poco tiempo de su clausura, la energía solar se ha posicionado como la tecnología renovable clave para hacer realidad, de forma decidida, a los acuerdos y objetivos que se están firmado durante estas semanas en Egipto.

Hasta ahora, la lucha contra el cambio climático se ha centrado en buscar la neutralidad de carbono mediante la eliminación de los combustibles fósiles para la generación, entre otros usos, de electricidad; pero la energía solar contribuye a solucionar nuevos desafíos que ya plantea el cambio climático como la degradación del suelo o la pérdida de biodiversidad.

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27), que está teniendo lugar en Egipto hasta el 18 de noviembre bajo el lema ‘Juntos para la implementación’, tiene como objetivo renovar y extender los acuerdos alcanzados en el histórico Acuerdo de París.

Además, en esta edición la aceleración de la transición energética va a tener un papel protagonista debido al contexto de crisis energética global que se suma a la emergencia climática que atraviesa el Planeta.

La flexibilidad y adaptabilidad de la energía solar da nuevas opciones de electrificación a regiones de Asia, África e Iberoamérica. Además, al tratarse de una fuente limpia y muy competitiva presenta una alternativa de desarrollo sostenible que genera nuevas oportunidades económicas mejorando, de esta manera, la vida de las personas.

Se incide sobre la necesidad de avanzar en la cooperación entre países, eliminando barreras a nivel legal, fiscal y financiero para igualar el proceso de implementación de energías renovables en general, y de energía solar, en particular.

Fuente: Energy News